El secretario general del sindicato panameño Suntracs, Saúl Méndez, abandonó este sábado 19 de julio la Embajada de Bolivia en Ciudad de Panamá, escoltado por un fuerte dispositivo de seguridad, y se dirige al Aeropuerto Internacional de Tocumen para abordar un vuelo comercial con destino a Santa Cruz de la Sierra, Bolivia.
Méndez había ingresado el 21 de mayo a la sede diplomática para solicitar protección, alegando persecución política tras la apertura de una investigación penal por presunta estafa agravada vinculada a terrenos en Bocas del Toro. El paradero continuó siendo motivo de tensión diplomática hasta esta resolución.
La Cancillería panameña emitió un salvoconducto respetando los tratados internacionales, lo que permitió su salida, en un vuelo programado —y retrasado—, que finalmente despegó después de las 17:00 horas.
“Esto queda ante la faz del país como una persecución política”, declaró su hija Melany Méndez, quien acompañó la salida con un mensaje de unidad y resistencia desde las afueras de la embajada.
Bolivia, a su vez, confirmó la concesión del asilo político, emitiendo el correspondiente salvoconducto y notificando a Panamá su compromiso de proteger a Méndez frente a posibles amenazas. La salida del dirigente sindical concita atención internacional, en medio de un proceso legal complejo y de la solicitud estatal de disolución del Suntracs por alegatos de desviación de su propósito inicial.