El gigante financiero JPMorgan Chase ha lanzado una alerta: la reciente recuperación del mercado de valores podría ser efímera, ya que se avecina un posible período de estanflación. Este fenómeno, que combina el aumento de los precios con una desaceleración del crecimiento económico, podría golpear la economía de los Estados Unidos este verano, según analistas del banco más grande del mundo.
¿Qué es la estanflación y por qué preocupa?
La estanflación no es un término nuevo. De hecho, la última vez que los Estados Unidos enfrentaron este fenómeno fue en la década de 1970, cuando el país experimentó una fuerte crisis económica. Los economistas aseguran que la estanflación es aún más dañina que una recesión, pues trae consigo altos costos de vida y estancamiento económico, lo que podría afectar las finanzas personales de millones de estadounidenses.
Mercados bajo presión
A pesar de algunos repuntes recientes, como el del S&P 500 el mes pasado, que registró sus mejores resultados desde 2023, la amenaza de la estanflación podría hacer que las acciones caigan nuevamente. Si esto sucede, los fondos de pensiones 401(k) y las inversiones de los ciudadanos comunes se verían gravemente impactados.
“Después del rebote reciente, creemos que la fase más débil del mercado está por venir, y podría parecerse a un episodio estanflacionario”, alertó JPMorgan Chase en una nota de investigación publicada este lunes.
¿Qué está detrás de la estanflación?
La incertidumbre en torno a las relaciones comerciales de Estados Unidos con sus principales socios también ha aumentado la preocupación de los analistas. Según JPMorgan, la situación de los aranceles es peor de lo que se esperaba a principios de año.
El S&P 500 ha subido solo un 0,5% en lo que va del año, lo que representa un rendimiento inferior al de los mercados europeos y asiáticos. Aunque se ha registrado un repunte, el panorama sigue siendo incierto.
Dimon y la amenaza de la estanflación
El CEO de JPMorgan, Jamie Dimon, ha sido uno de los mayores críticos de la situación económica actual. En una reciente entrevista con Bloomberg, Dimon advirtió que la amenaza de la estanflación en Estados Unidos es ahora mucho mayor que lo que la mayoría de los analistas había predicho.
"Existen grandes posibilidades de que enfrentemos una estanflación", señaló Dimon. Aunque no hizo una predicción certera, agregó que es crucial estar preparados para lo peor.
Según Dimon, los déficits fiscales globales y el fenómeno de la remilitarización mundial están exacerbando la inflación. Además, señaló que la reestructuración del comercio internacional, impulsada por las políticas comerciales de la administración Trump, también contribuye a una presión inflacionaria constante.
El riesgo de complacencia en los mercados
Dimon también advirtió sobre una “extraordinaria complacencia” en los mercados, señalando que aún no se ha sentido el impacto total de las políticas comerciales agresivas implementadas durante el mandato de Trump. Aunque los mercados han reaccionado parcialmente, el efecto completo de los aranceles y las restricciones comerciales podría tardar más tiempo en reflejarse.
La voz de otros economistas
Dimon no está solo en sus preocupaciones. Otros economistas de renombre también han alertado sobre el regreso de la estanflación. Mark Zandi, economista jefe de Moody's Analytics, también se mostró preocupado: “Direccionalmente, nos dirigimos hacia una estanflación”, dijo en marzo. Según Zandi, las políticas comerciales y migratorias del gobierno actual están empujando la economía en esa dirección.
En abril, Dimon ya había predicho que la economía estadounidense podría estar en riesgo de una recesión, pero advirtió que, incluso si no se alcanza ese punto, las políticas actuales seguirán ralentizando el crecimiento económico.
¿Qué sigue para la economía?
La gran pregunta sigue siendo: ¿cómo afectará la estanflación al bolsillo de los estadounidenses? Con los aranceles y las políticas comerciales en juego, la incertidumbre económica podría seguir afectando tanto a los mercados como a la vida diaria de las personas.
Con los mercados globales mostrando señales de debilidad y el costo de vida en aumento, los próximos meses podrían ser cruciales para determinar si Estados Unidos entra en un período de estanflación o si la economía logra evitar este sombrío escenario.
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